En el 2024 se conmemoraron los 100 años del Ruido de sables, uno de los tantos hechos que van a moldear al Chile del siglo XX, ya sea en lo político, económico, social o cultural, debido a que va a transformar el status quo que había en la nación. Esta columna analiza los cambios que va a generar este hecho particular en el ámbito político e institucional, precisando las circunstancias en las que se encontraba Chile al momento de producirse el Ruido de sables. Asimismo, se examinan las transformaciones que produjo en el país de forma inmediata y en una duración más extendida. Por este motivo, se indaga en lo que se ha escrito en la historiografía sobre las consecuencias que dio este hecho a la nación.
Antecedente del Chile previo al Ruido de sables
En el Chile del comienzo del siglo XX estaba ocurriendo una serie de cambios en términos sociales y políticos por la crisis que impactará en la vida de los ciudadanos, que va a ser categorizada la “cuestión social”. Según Paul Drake, se va a deber por el crecimiento urbano que están pasando las ciudades, ya que la población entraba en un proceso de industrialización, va a traer como consecuencia un mayor pluralismo en los núcleos urbanos, esto causará una desigualdad y condiciones precarias al sector obrero que viven en la ciudad[1]. Asimismo, se produjo una caída de la demanda de salitre, el principal eje económico de Chile en estos años, también una inestabilidad política producto de las demandas sociales por las organizaciones sindicales y los movimientos obreros. En la escala internacional, en los primeros años de este siglo estaban aconteciendo diferentes situaciones como van a ser la Primera Guerra Mundial o la Revolución Rusa, esto ocasionando efectos en la nación.
En el poder ejecutivo, fue electo Arturo Alessandri Palma como presidente de la República en 1920, esto a base de dar una posible solución a los anhelos sociales solicitados por la población chilena[2]. Llegando al poder con un discurso populista que se va a basar en resolver los problemas que estaban pasando la clase baja en sus condiciones de vida, esto se afirma por sus declaraciones que va a realizar como candidato presidencial, afirmando, “reconocida por todos los pensadores y por los más eminentes estadistas en orden a resolver con criterio de estricta justicia y equidad, los derechos que reclama el proletariado en nombre de la solidaridad, del orden y la conveniencia social.”[3] Este tipo de discurso va a tener como consecuencia la elección de Alessandri como presidente.
El Ruido de sables y sus consecuencias políticas
El Ruido de sables fue uno de los tantos hechos destacables, debido a que generó múltiples cambios a nivel nacional. Este episodio se produjo por el descontento del cuerpo militar, dado que los parlamentarios de la época no estaban dando solución a los problemas sociales que había en Chile. Por esto mismo, el 3 de septiembre de 1924 se efectuó por medio del ejército el reclamo contra el Congreso Nacional, ya que justamente ese día se estaba discutiendo sobre la dieta parlamentaria, algo que enfureció a los jóvenes militares impidiendo que se pueda realizar la sesión de forma normal a base del ruido de sus sables.
Según la historiadora Verónica Valdivia, el Ruido de sables produjo múltiples cambios en la legislación del congreso, indicando que “(…)el ocho del mismo mes, en una sesión meteórica, el Congreso aprobaba por fin las leyes sociales propuestas”[4]. Esto evidencia la eficacia que tuvo el Ruido de sables en 1924 para concretar los derechos sociales. Pero al mismo tiempo de que se apruebe estas nuevas normas, se va a producir la renuncia y él autoexilió del presidente de la época Arturo Alessandri[5], que va a causar una inestabilidad política, por esto mismo, una Junta de Gobierno presidida por el general Altamirano que van a ser los que controlan el país. Posteriormente, al siguiente año se va a traer de vuelta Alessandri para liderar y finalizar el proceso de cambio constitucional[6]. Uno de los hitos más relevantes de esta renovación va a ser la separación de la Iglesia y el Estado, aconteciendo uno de los hechos más relevantes, ya que Chile se convierte oficialmente en un Estado laico, finalizando con algo que tiene origen indiano[7]. Asimismo, cambiará el sistema parlamentario a un régimen presidencialista, entregando más atribuciones al presidente de la República y reduciendo las facultades del Congreso, siendo las siguientes: “la eliminación de las leyes periódicas(…), las prácticas parlamentarias, introducir las “urgencias” y conservar un fuerte veto presidencial”[8]. Esta Constitución va a generar un gran cambio en la forma de manejar el país, debido a que se rompe con la anterior carta magna que perduró casi 100 años. Además, según Enrique Brahm va a comentar la dificultad de adaptación, causando así la crisis institucional que va a provocar una inestabilidad a nivel político en la nación.[9]
Posteriormente, creada la constitución, Alessandri vuelve a irse de Chile y sube al poder Carlos Ibáñez del Campo, participante del Ruido de sables, toma la posición de presidente de la República en 1927, siendo un gobierno que se caracterizó por tener un carácter autoritario. En este periodo la búsqueda principal fue modernizar el país, centrándose en diferentes reformas, siendo la creación de una policía civil como Carabineros de Chile y el fortalecimiento del Banco Central. Igualmente, jugó un papel fundamental en las políticas con los sindicatos, teniendo como proyecto más relevante en este ámbito la “Ley Organización Sindical de 1928”[10]. Según Jorge Rojas, esta legislación tuvo como objetivo debilitar el poder de los sindicatos independientes y promover las organizaciones controladas por el Estado[11]. Esto demuestra que Ibáñez, estando en el cargo, pretendió controlar todas las formas de movilización o asociaciones, al mismo tiempo, tratando de evitar el supuesto peligro comunista, ya que el mandatario lo observaba como una posible amenaza, por miedo a que ocurra una Revolución en Chile[12].
Aunque su mandato va a caer en una profunda crisis, después de la Gran Depresión de 1929, que trajo consecuencia en todo sentido para Chile, siendo uno de los países más damnificados del mundo, en particular su economía externa por su poderío minero[13]. Esto va a dañar la credibilidad del presidente y su gestión para superar la crisis que está afectando en la vida cotidiana de los chilenos, causando múltiples manifestaciones contra el gobierno autoritario de Ibáñez. Según Paul Drake, estas protestas vinieron de dos facciones, una de grupos de estudiantes moderados y conservadores, y la otra desde grupos de izquierda, principalmente marxistas[14]. Esto va a causar la renuncia del presidente Ibáñez y su exilio del país en 1931.
Después Chile va a caer en una profunda crisis política, iniciada en 1931, pasando ocho personas como máximas figuras del poder ejecutivo hasta la segunda elección presidencial de Arturo Alessandri a su vuelta al país en 1932. Comenzando con el vicepresidente del exmandatario Ibáñez, Renato González. En este periodo van a surgir por primera vez gobiernos de Izquierda como van a ser Juan Esteban Montero y el gobierno de Marmaduke Grove con la breve República socialista, cabe señalar que este último tuvo participación en el Ruido de sables. Esta aparición de los partidos de izquierda en Chile, se va a ver como una posible solución de la crisis que está padeciendo la nación[15]. Aunque va a ser un fracaso, ya sea por la inestabilidad del país o que sus políticas públicas en sus gobiernos no pudieron dar solución para Chile.
En 1932 se va a establecer un nuevo proceso electoral, saliendo nuevamente electo Alessandri, teniendo como primera instancia tratar de estabilizar la crisis que se estaba viviendo en Chile. Por esto mismo, el segundo mandato va a contener un carácter más autoritario, dejando a lado la figura de la posición populista, acercándose a la derecha política y económica, para poder “arreglar» la profunda crisis que había en la nación. Sin embargo, su gobierno dejó tensiones políticas con diversos partidos políticos, especialmente con los sectores obreros y de izquierda, aunque uno de los sucesos más relevante va a ser la matanza del Seguro Obrero, esto mismo va a desacreditar la figura de Alessandri, siendo aprovechado por parte del Frente Popular para acceder en el poder tras el fin de su mandato en 1938[16].
Reflexión
En conclusión, se puede afirmar que el Ruido de sables fue uno de los hechos que cambió las circunstancias nacionales del comienzo de siglo XX, provocando diferentes situaciones como son: la Constitución de 1925 o las demandas por los derechos sociales de los trabajadores y obreros, asimismo la aparición de nuevos actores políticos, principalmente militares. Aunque también va a ocasionar una mayor inestabilidad institucional, observándose a lo largo de los 10 años después de lo ocurrido en el Ruido de Sables.
En definitiva, después de los 100 años de lo sucedido en el Ruido de sables se ha tenido como consenso general en mantener al poder militar subordinado al poder civil, ya que a lo largo de la historia de nuestro país se va a observar cómo las intervenciones de los militares van a generar una inestabilidad institucional, rompiendo muchas veces los marcos jurídicos y democráticos de la nación, por esto mismo, se debe reflexionar sobre las limitaciones que debe tener las Fuerzas Armadas en Chile. Asimismo, siempre ver las soluciones garantes a base de un pensamiento democrático que tenga a la ciudadanía como centro de la discusión.
[1] Drake, Paul. “Socialismo y populismo Chile 1936-1973”. Ed. Universidad Católica de Valparaíso, 1992, p. 9.
[2] Nazer, Ricardo. “Electores, sufragio y democracia en Chile”. Santiago Universidades, n.º 48, 2000, p. 218.
[3] Alessandri Palma, Arturo, 1868-1950. Alianza Liberal: programa: discurso, programa del candidato a la presidencia de la República. Disponible en Memoria Chilena, Biblioteca Nacional de Chile. https://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-625439.html.
[4] Valdivia, Verónica. “Yo, el León de Tarapacá. Arturo Alessandri Palma, 1915-1932”. Historia, vol. I, n.°32, 1999, p. 538.
[5] Carta redactada el 8 de septiembre de 1925 por Arturo Alessandri Palma. https://www.bcn.cl/obtienearchivo?id=documentos/10221.1/17639/1/Carta%20de%20renuncia%20de%20Arturo%20Alessandri%20(8%20septiembre%201924).pdf
[6] Brahm, Enrique. “¿Volver a la Constitución de 1925? Una propuesta sin fundamento histórico”. Revista Chilena de Derecho, vol. 46, n.º 1, 2019, p. 85.
[7] Ibid., p. 88.
[8] Ibid., p. 84
[9] Ibid., pp. 88-89.
[10] Ley Chile, Decreto 2148 31-DIC-1928 MINISTERIO DE BIENESTAR SOCIAL, Biblioteca del Congreso Nacional. https://www.bcn.cl/leychile/navegar?idNorma=1036775
[11] Rojas, Jorge. La Dictadura de Ibáñez y los sindicatos (1927-1931). Sociedad y cultura, 1993, p. 69
[12] Pinto, Julio. “¡La cuestión social debe terminar! La dictadura de Carlos Ibáñez en clave populista, 1927-1931”. Historia, Vol.53, N.º 2, 2020. Extraído en: https://www.scielo.cl/scielo.php?pid=S0717-71942020000200591&script=sci_arttext
[13] Llorca-Jaña, Manuel y Nazer, Juan. “CONTROL DE CAMBIOS EN CHILE DESPUÉS DE LA GRAN
DEPRESIÓN: EL ROL DEL CONDECOR Y SU MODUS OPERANDI, C.1942-1952”. Revista Gestión Pública, Vol. IX, N.º 2, 2020, p. 233.
[14] Drake, Paul. Socialismo y populismo Chile 1936-1973. Ed. Universidad Católica de Valparaíso, 1992, p.46.
[15] Ibid., 56
[16] Período 1925-1973, Historia Política, Biblioteca del Congreso Nacional de Chile. https://www.bcn.cl/historiapolitica/hitos_periodo/detalle_periodo.html?filtros=1,2,3,4,5,6&per=1925-1973&pagina=3&K=1